La fecha de la celebración de la Semana Santa se ajusta a la luna llena
La Semana Santa es un periodo de siete días en el que se recrea la pasión, la muerte y la resurrección de Jesucristo. Este evento está cargado de simbología y de curiosidades, pero un aspecto muy relevante para los creyentes y para los no creyentes es que las fechas de su celebración no son fijas y varían cada año entre los meses de marzo y abril. Estos cambios en el calendario se deben a las fases lunares.
El día que marca la fecha de la celebración de la Semana Santa es el Domingo de Resurrección, este día siempre debe ser el domingo siguiente a la primera luna llena de la primavera. Ese factor es el que provoca que las fechas de la Semana Santa varíen en el calendario gregoriano, que es el que se utiliza en occidente y que procede del calendario solar que muestra la posición de la tierra respecto al sol.
A diferencia de lo que ocurre con otros eventos, la Semana Santa se ajusta a los ciclos de la luna llena y esto se debe a que los cristianos consultaban los evangelios para establecer el día de la muerte de Jesucristo, según las escrituras este suceso tuvo lugar el día de la Pascua Judía que se establece en función del calendario lunar.
Posteriormente en el Concilio de Nicea que se celebró en el año 325 se determinó que el Domingo de Resurrección no podía coincidir con el día de la celebración de la Pascua judía y por eso se estableció que el Domingo de Resurrección sería el primer domingo tras la primera luna llena de primavera.